Atrapados en la Cámara
con mi amigo el síndico "Una mano" De Souza
gritamos
Fernando Abal Medina
y luego corrimos pisoteando senadores.
Ordenó nuestro pronto arresto quien preside el Senado de la Nación.
Dicha medida
fue aplaudida por todos
los sectores.
¿Eran los senadores
una máquina que debía comer?
Así se justificaban...
Yo no quise ver
cómo engullían
la otra mano
de mi amigo el síndico "Una mano" De Souza.
domingo, 30 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario